Este martes se llevó adelante una nueva audiencia en el marco de la causa de las brigadas, particularmente en los hechos sucedidos en el Ex “Pozo de Quilmes”, transcurrido 48 años de los hechos. El juicio está a cargo del Tribunal Oral Federal N°1 de La Plata, integrado por los jueces, Ricardo Basilisco, Rodríguez Eggers y Walter Venditti, y se imputan con carátula de genocidio a una docena de funcionarios de facto, en su mayoría militares y policías, responsables de la última dictadura militar.
Néstor Rojas es un sobreviviente del Pozo de Quilmes y otros centros del horror conocido como circuito Camps, tras haber sido secuestrado cuando tenía 22 años. “En este valor fundamental de la recuperación de la memoria histórica pongo mi compromiso como militante popular”, dijo Rojas, dirigente de la Central, militante y combatiente de los años70’, secuestrado en 1975 “Detenido Desaparecido en el “Circuito Camps”, y militante de la Agrupación de Base “La Molina”, parte de la FeNaT.
El dirigente declaró que fue secuestrado en el cruce de Florencio Varela “en momentos en los que se llevaban a cabo movilizaciones del Movimiento Obrero”, privado de la libertad y detenido-desaparecido. También estuvo en el Pozo de Quilmes. “A partir de allí comenzó un periplo de los peores que me ha tocado vivir en mi vida. Tenía 22 años, fue el 3 de julio de 1975 y en estos días se cumplen 48 años de aquellos acontecimientos”, detalló.
Fue trasladado a la Comisaría Primera de Berazategui y posteriormente, lo llevaron a otros lugares; entre ellos Puente 12. “Cuando uno habla del Área 111, del Circuito Camps, se habla de 29 centros clandestinos de exterminio que fueron parte de ese aparato de terrorismo de Estado, pero hubo más porque la comisaría no está señalizada como Sitio de Memoria”, advirtió.
“Recibimos tortura en forma permanente, cada dos o tres horas. Fue un verdadero centro de terror”, dijo en torno al centro de Puente 12. Después, llegó a Quilmes, donde -entre otras cosas- le tiraron alcohol en la cara y prendieron un encendedor cerca. El 18 de octubre de 1983 recuperó la libertad.
Un modelo que se perpetúa
Tras su declaración, el dirigente reflexionó: “El Pozo de Quilmes es el dispositivo fundamental desde el cual se formateo a sangre y fuego el actual modelo que padecemos. ‘Kilmes’ es el nombre propio de un pueblo que resistió hace más de 400 años. Pueblos que derrotados por los colonialistas, fueron arriadxs como ganado, más de mil kilómetros encadenadxs, a pie, mujeres, hombres y niñxs hasta la zona de la actual Quilmes”.
“En esta historia de más de quinientos años en la cual nos reconocemos: de saqueo Colonial e imperialista y resistencia de los pueblos. Como sobreviviente, militante y combatiente de los años 70’, en los interrogantes de las culpas por sobrevivir, las responsabilidades de intentar recuperar voces, memorias, proyectos de vida y los sueños colectivos de mis compañeras y compañeros, devoradxs por las entrañas del monstruo, empeñado desde sus recursos extremos, en detener la evolución de la historia humana”, afirmó Nestor.
Asimismo aclaró: “En todo ello el afán de la verdad la búsqueda inclaudicable de justicia. En la memoria de Cientos, de miles de Compañeras y Compañeros los compromisos militantes del presente. Están vivos los proyectos de justicia y libertad en las construcciones populares y colectivas del presente. Venimos una vez más a fortalecer los proyectos y los programas de lucha, a levantar las banderas justas, solidarias y humanistas.”, remarcó Rojas.