Decenas de organizaciones de las diversidades y de mujeres, partidos políticos, organizaciones sociales y el pueblo movilizado en general, colmaron las calles tucumanas.

En un año de gobierno en el que creció la pobreza, se perdieron cientos de miles de puestos de trabajo, se cerraron fábricas y organismos públicos, se recortó el salario a trabajadores activos y jubilados, entre otras muchas pérdidas populares, el gobierno además avanza en la batalla ideológica y cultural.

«Javier Milei ataca sin reparos a quienes pensamos distinto, demoniza la militancia, amenaza a la izquierda y la vicepresidenta es defensora expresa de los represores de la última dictadura militar. Niegan el terrorismo de estado, desmantelando los espacios que garantizan continuidad en este proceso complejo de reparar nuestra memoria; un duelo social que aún no está saldado», dijeron durante la movilización.

A esta cruel política nacional los tucumanos tenemos que agregar la complicidad del gobierno provincial. Por un lado garantizó la mayoría de votos tucumanos para la Ley Bases y la derogación de la movilidad jubilatoria, además de una rápida adhesión provincial al RIGI, entre otras entregas. Pero también muestra coincidencia ideológica, aunque se confirme peronista, en la persecución de los jóvenes en los barrios y en la defensa de un jefe de policía que demoniza la pobreza. El último ataque recibido fue la connivencia frente a un grupo de ex-militares que organizan actividades para reivindicar el Operativo Independencia en su 50 aniversario.

La marcha y acto del 1 de septiembre en Tucumán, con unas 8.000 personas movilizadas, logró expresar la indignación acumulada, que las organizaciones de las diversidades supieron unir en un grito por el orgullo, antifascista y antirracista.

Como dijo la compañera que tomó la palabra por la CTA, este gobierno es reaccionario porque pretenden volver atrás la rueda de la historia, pero los argentinos en la calle les mostramos a Milei y a los fascistas envalentonados, que a la rueda de la historia la mueve el pueblo.