Los reclamos de los azucareros del Ingenio San Isidro son el pago del 50% impago de las indemnizaciones a los trabajadores despedidos sin causa en 2018. El cumplimiento de los convenios colectivos.
También resolver la grave y urgente situación socio económica de los despedidos del Ingenio San Isidro producto del desempleo al que fueron unilateralmente condenados.
Y el cese inmediato de las persecuciones, amenazas de despido o sanciones y cualquier represalia contra los trabajadores azucareros.
Comunicado conjunto de solidaridad
«Estamos preparados para redoblar las acciones (sindicales y judiciales) en defensa de los derechos constitucionales de los trabajadores del Ingenio San Isidro y de su organización sindical con personería gremial. Para lo cual estamos organizando la solidaridad del movimiento obrero y de las estructuras que agrupan a otros sectores sociales.
«Y seguimos estando dispuestos a abrir un proceso de negociación de buena fe con la empresa. Un proceso que apunte a reparar los daños causados por los despidos sin causa y sin indemnización, por las prácticas antisindicales y por la fijación unilateral de los salarios que viene imponiendo la empresa.
«Tenemos la voluntad de sentarnos a dialogar y negociar las medidas que sean necesarias para reconstruir la legalidad y los equilibrios perdidos en la actividad del Ingenio y, en consecuencia, en la vida económica, laboral y cotidiana de nuestro pueblo de Campo Santo y nuestro departamento de General Güemes.
«Esta reconstrucción de los equilibrios perdidos comienza seguramente por el pago de las indemnizaciones por despido sin causa que se encuentran aún pendientes, luego de casi 3 años de producidas esta medida que tanto daño a causado a las familias y a nuestra economía.
«Necesitamos más y mejores puestos de trabajo. Y estamos dispuestos a luchar por ellos, creando las condiciones que los hagan posibles.
«Empleos que respeten los derechos de los trabajadores: a afiliarse, a ser representados por su organización con personería gremial,; a elegir delegados de fábrica y surco; a plantear sus reivindicaciones a la empresa y al Estado; a pagar las cuotas de afiliación al sindicato.
«No admitimos ni admitiremos las ‘listas negras’ que circulan en General Güemes para castigar a los trabajadores que osaron ejercer sus derechos.»
«Dentro de esta línea de firmeza y de nuestra vocación de mirar el futuro pensando en el interés de todos los trabajadores y de sus familias, estamos dispuestos a sentarnos a dialogar buscando una suerte de Pacto Social tripartito que siente las bases de una comunidad próspera y justa basada en el trabajo decente.
«Apostamos a acordar lo necesario para que el potencial productivo de nuestra región (centrado en la agroindustria, los biocombustibles, la energía, la logística y los pequeños y microemprendimientos) sean el fundamento para mejorar nuestras condiciones de vida y de trabajo.
«Campo Santo, 17 de mayo de 2021».