Aquella fatídica noche es recordada como “La Noche de los Bastones Largos” porque la orden estricta a las fuerzas policiales fue reprimir con dureza y “a bastonazos” a quienes se resistieran a desalojar las cinco facultades que estaban tomadas en la UBA como rechazo a la decisión de los militares de intervenir las Universidades Nacionales para anular el régimen del co-gobierno instaurado por la Reforma del ’18. Producto de la represión no sólo se destruyeron aulas, laboratorios y bibliotecas, sino que se detuvieron al menos a 400 personas.
Este episodio repudiable fue la génesis de la decadencia académica y cultural de la Universidad en nuestro país, y de la llamada “fuga de cerebros”, ya que centenares de académicxs e investigadorxs de gran prestigio fueron cesanteadxs, renunciaron a sus cátedras o abandonaron el país. En total emigraron 301 profesorxs de la UBA, de los cuales 215 eran científicxs.
Con la intervención del gobierno de facto a las Universidades Nacionales se les aplicó una estricta censura en los contenidos curriculares y se desmanteló un proyecto reformista de Universidad científica de excelencia, sobre la base de la estrecha vinculación entre investigación y docencia.
Recordamos y rendimos homenaje a quienes en aquel momento resistieron con convicción, con sus cuerpos y sus ideas al atropello dictatorial sobre la Universidad Pública.
¡NUNCA MÁS!
CONADU Histórica